Inmortalidad

Suena a juego de palabras; pero quien lo entienda y lo haga vivirá para siempre.

Durante mucho tiempo se ha hablado el cómo preservar la raza, el cómo buscar la juventud, el cómo mantener la energía y hoy me di cuenta.

Para vivir es necesario hacerlo; vivir. El existir es ya por la naturaleza una acción, por lo tanto, mientras estemos, hay que hacer la acción real de vivir.

Trascender es sólo el hecho de vivir “haciendo”. Quien no hace mientras vive, no vive sino no lo contrario por lo tanto muere. Lo que llamamos muerte en vida.

Conocí un tipo mal encarado y regañón que a pesar de su mal carácter fue quien me hizo ver hoy esta realidad.

Este tipo fue mi maestro. Este hombre fue revelando poco a poco verdades a través de su doctrina me enseño no sólo de su materia sino del día a día.

La justica, la verdad, el amor y la paz… Los cuatro elementos básicos de quien sabe vivir. Digamos algo así como la gasolina del carro. El detalle aquí es que se podría aparentar que en general lo hacemos y en realidad es muy fácil aparentarlo.

El trabajo es un medio para desarrollar estos cuatro elementos. El trabajo arduo nos expone al resto de la sociedad y la relación social es la que pone en evidencia la existencia de estos cuatro elementos.

Bueno les decía, de este tipo; en verdad era un tipo mal hablado e incisivo, poco prudente y podría llegar a ser alborotador cualquiera pero sus acciones eran más profundas de lo que se parecía. El sabía vivir.

Cuando hacemos algo a medias, en realidad no lo concebimos, es como decir que puedas estar medio embarazada o puedes estar medio contratada o medio viva, y son acciones imposibles. O vives o mueres. No se pueden las dos cosas al mismo tiempo. Y créanme, este hombre sabía vivir.

Es por eso que yo creo que si en tu vida haces cosas a medias (mediocre) en realidad no las haces y por lo tanto no disfrutas las cosas realizadas y por ello jamás se vivió, sino medio se existe y por lo tanto muerte.

Pero quien al final quien vive viviendo, en realidad no muere por que aún cuando lo haya hecho; sus acciones siguen, jóvenes, con energía. Es el conocimiento que el maestro deja en el alumno, la educación que da un padre a un hijo, es lo que te hace ir más allá, más allá de unas cuantas generaciones. Es la huella que deja quien vive. Es la forma de trascender.

Gracias Don Antonio…